En los últimos años se ha venido popularizando en el mundo empresarial el término en inglés “outsourcing”. Esta palabra puede ser traducida como “externalización”, “tercerización”, “subcontratación” o, incluso, “deslocalización”; y se utiliza para referirse a servicios ofrecidos por organizaciones o personas ajenas a la empresa.
El outsourcing es una alternativa cada vez más presente en las organizaciones por los diversos beneficios que supone. Permite simplificar los procesos de administración o de producción al delegar tareas a terceros. De esta forma, la organización primaria puede liberarse de diversas tareas asociadas, como la gestión de calidad, la producción, etc. Una de las modalidades más comunes de outsourcing es el llamado “outsourcing contable”.
Cualquier organización requiere llevar una contabilidad de sus recursos, sea con fines administrativos o en aras de cumplir con sus obligaciones tributarias. Sin embargo, esto requiere de grandes equipos de contadores y expertos, al igual que de espacios físicos donde trabajar (oficinas), recursos para mantener estas unidades, etc. Como solución a este problema, han surgido muchas organizaciones dedicadas a ofrecer servicios contables, liberando así a muchas empresas de tener que invertir en más personas, recursos, y otras necesidades asociadas.
Estas organizaciones especializadas, muchas veces son conocidas bajo el nombre de “firmas contables”, es decir, agrupaciones de contadores dedicados a llevar la contabilidad de clientes específicos. Aun así, pueden correr por muchos nombres, pero su finalidad es la misma.
Emprender un outsourcing contable
Para muchos contadores, trabajar por su propia cuenta es una opción muy común. Convertirse en un contador independiente ofrece muchas soluciones y libertades (a propósito, si estás pensando en convertirte en contador independiente, aquí te tenemos algunos tips).
Hablar de un contador independiente es una manera de emprender un outsourcing contable, en tanto que supone convertirse en una persona que puede ser subcontratada para llevar actividades contables.
Emprender un outsourcing contable puede significar comenzar tu propia organización especializada en contaduría, implicado una multiplicidad de contadores en el proceso. Esto ofrece muchos beneficios para el emprendedor, como la posibilidad de poseer una cartera de clientes más amplia, un equipo de personas de quien apoyarse, mayores ingresos, etc.
Te invitamos a que conozcas más sobre emprender un outsourcing contable participando en nuestro webinar con el profesor, contador público, y experto en la materia: Irvin Cedeño. La cita es el jueves 8 de septiembre a las 2 pm (VET) y puedes inscribirte aquí. ¿Ya pasó la oportunidad? También puedes solicitar la grabación aquí.
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