Tenemos la necesidad de hacer publicidad a todo aquello que hacemos o queremos hacer y en un mundo tan apresurado, hasta los segundos cuentan.
Una técnica para dar a conocer tu idea, negocio, actividad o proyecto es el discurso del ascensor. Este consiste en decir en 30 segundos o menos lo que haces, atrapando la atención de tu receptor sin dejar dudas y con ánimos de conocer más.
El discurso del ascensor pretende enganchar, por lo que debe estar lleno de coherencia, espontaneidad y utilidad. Debe estar adaptado a tu público por lo que se recomienda hacer varias versiones.
Prepáralo y ensáyalo de manera que aproveches cada segundo. Explica:
- Qué haces
- A quién se dirige
- Qué resuelve y
- Cómo lo hace
Consejos para redactarlo:
- Utiliza un lenguaje claro, directo y conciso. Debe entenderse perfectamente.
- Incluye un beneficio para aquella persona que escucha.
- Evita el modo impersonal, utiliza la primera y segunda persona.
- Genera curiosidad y apela a las emociones.
- La duración total debe estar comprendida entre treinta segundos y un par de minutos como mucho.
Relájate, piensa en las cualidades de lo que quieres comunicar, escríbelas y ensáyalo tomando el tiempo. Agrégale espontaneidad y ¡ponlo en práctica!